Cuándo Internet deja de ser algo anecdótico en tu vida y se convierte en una herramienta imprescindible en tu trabajo y un ingrediente fundamental para diseñar parte de tu tiempo de ocio, valoras la revolución de la llamada web 2.0.

Mas allá de las innovaciones tecnologías que ha experimentado (y que al margen de la mejora de la experiencia del usuario son invisibles para el mismo), la nueva Internet es la más potente herramienta de comunicación, superando servicios tradicionales como correo electrónico, foros o chats. La propia web ha pasado de un lugar que con mucha información a un espacio para interactuar con el otro. Ya no tienes a tu disposición toda la información de la web sino también la que te puede ofrecer cada uno de los usuarios conectados a la web 2.0, ya sea mediante blogs, wikis, redes sociales o cualquier otro espacio de la misma. Y si no, a los hechos me remito.